¡¡¡Ya tengo mi maleta!!!

Por fin, después de hacerse esperar un poquito, llegó mi maleta. Bueno, realmente llego Rosa con mi maleta, Cristina ya estaba con ella (ya os las presentaré en otro momento).

Primero nos fuimos a comer una rica Tabla, menos mal que el comedor era casi exclusivamente para nosotras, porque no dejamos de hablar de aparatitos, cremas, comer, chupar, saborear. Ellas me contaban sus experiencias en la maleta (un guiño para esa tarta especial de Rosa, jaja), yo las miraba entre sorprendida y envidiosa. -¡En un año sabré tanto como vosotras!- No nos echaron del restaurante porque allí son muy educados, pero cuando nos fuimos no había nadie mas y los empleados estaban comiendo...

¡¡A por la maleta!! Estaba en la habitación de Rosa y como todo lo bueno, se hizo esperar. Mira que perder la llave… Jaja

Llegamos a la habitación y allí estaba mi maleta, totalmente roja:

Cristina atacó los aceites, lubricantes, velas… me los fue haciendo probar todos, tocarlos, saborearlos, sentirlos… yo estaba sorprendida de las texturas, de los olores, de los sabores!! (os recomiendo que si tenéis la oportunidad lo hagáis, ahí entendí porque las mujeres salen tan satisfechas de las reuniones, es una experiencia única). Entonces le toco el turno al Volaré, bufff , de momento este no os lo contaré, quitaría la gracia si vais a una reunión…

Rosa empezó por los aparatos con pilas, primero el nuevo vibrador de LIS, Pícolo, me encantó, la textura, las vibraciones, que chulo!! Pero… ¿Dónde se apaga? Jaja, creo que ahí si me puse colorada y ellas riéndose de mi inocencia. Claro!! Jooooooooooooooo, yo era prácticamente virgen…. Vibradores de todas las formas y colores, anillas, dedo-vibradores… no se terminaban… (ya iré presentando a cada uno de ellos y espero que la gente que los haya probado añada su experiencia, será muy divertido). La de pilas que necesitamos, la de sistemas diferentes para ponerlas, espero acordarme de todos, jaja.
Y la de risas que nos pasamos mientras los íbamos descubriendo, éramos como niñas con juguetes nuevos: yo porque no los conocía; ellas porque les iban descubriendo juntas y me contaban sus experiencias con ellos… fue un rato divertidísimo.

Al final quedamos en volver a juntarnos las tres, con el resto de asesoras de la zona centro dentro de poquito, para compartir, aprender y como no, para echarnos unas risas.

Con Cristina quedé para asistir a un par de sus reuniones, estoy deseando que lleguen, por como es ella sé que las reuniones no tendrán desperdicio, que aprenderé mucho y sobre todo, que no dejaré de reirme…

Ah!! Las reuniones son hoy!! Mi primera reunión como asesora de La Maleta Roja.

Hasta pronto!!